El británico Rocky Fielding (30-3, 18 KOs), quien se desempeñó en la segunda categoría de peso medio y semipesado, ha decidido retirarse.
Como aficionado, Fielding llegó dos veces a las semifinales del Campeonato de Inglaterra (ABA) y se convirtió en profesional en 2010.
Por primera vez, el luchador ya se notó en 2011: ganó un torneo de un día. Trono de boxeador (las tres peleas se completaron antes de lo previsto). Al año siguiente se convirtió en el campeón de Inglaterra en la división de peso súper mediano, luego en el campeón de la Commonwealth británica. Se llevó los títulos regionales de WBA Inter-Continental y WBC International, pero en la batalla por el título de retador obligatorio (WBC) perdió por nocaut temprano ante su compatriota Callum Smith.
En 2017, le arrebató una contundente victoria a John Ryder y se convirtió en el campeón de Gran Bretaña. Luego, por primera vez, fue a boxear fuera de Gran Bretaña: le quitó sensacionalmente el cinturón de campeón mundial según WBA World (secundario en la jerarquía de WBA) al alemán Tyrone Zeuge.
En 2018, en Estados Unidos, perdió este título ante la superestrella mexicana Saúl Canelo Álvarez, tras lo cual desapareció del boxeo durante un año. Regresó al peso semipesado, tuvo varias peleas interinas. En diciembre del año pasado, luchó por los títulos británico y de la Commonwealth británica con el prospecto Dan Aziz, pero perdió antes de lo previsto sin oportunidad.
“Anuncio mi retiro”, escribe Fielding. – Pasó 26 años en el boxeo. Entré al gimnasio por primera vez cuando tenía solo 9 años. Y por casualidad, quería mantenerme en forma para el comienzo de la temporada de fútbol. Soñaba con convertirse en campeón mundial, peleando en la arena. Madison Square Garden y ser representado en el ring por el legendario Michael Buffer. Así que puedo decir que todos mis sueños se han hecho realidad”.
En septiembre, Fielding reveló en qué es particularmente bueno Canelo. En 2020 estuvo en la lista de candidatos para rivalizar con Saunders, pero la pandemia lo arruinó todo.