La mirada de Alexander Volkov, con la que el pesado ruso perforó a su rival, subió al octágono, tuvo el efecto exactamente contrario en Tom Aspinall, convenciendo al británico de su fácil victoria.
“Volkov no me quitaba los ojos de encima. Creo que quería intimidarme y eso me hizo reír”, dijo el inglés en una conferencia de prensa en Londres. “Puedes preguntar en mi rincón – Volkov continuó mirando, y me partió la risa. En ese momento me di cuenta que todo iba a ser muy malo para él. Se podía ver en sus ojos».
Recordemos que el enfrentamiento de peso pesado ruso-británico, que encabezó el torneo UFC Fight Night 204 en Londres el fin de semana pasado, terminó ya en el primer asalto con la derrota de Volkov por un doloroso agarre en el brazo.
Después de la pelea, el gerente de Drago hizo una declaración diciendo que la fatiga mental fue la razón de la derrota de su pupilo y que grandes cambios esperaban al equipo ruso.
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