«Pregúntale a Strickland, ¿quién le ganaba en el gimnasio todos los días?», dijo el luchador checheno en una entrevista con ESPN. «¿Cuántas veces lo subestimé? ¿Cuántas veces le di una paliza? Acabó yendo a su entrenador: ‘Por favor, dile a este tío que trabaje más fácil’. Intenta hacerse pasar por macho, ¡pero tú no eres macho, tío!».
«Cuando te inmovilicé con fuerza, fuiste a quejarte a tu entrenador. Te estaba dando una paliza y tú huías de mí. Yo estaba en su ciudad, en su gimnasio. Nunca nadie vino a mi gimnasio e intentó darme una paliza. Fui a todos esos tipos, a todos esos gimnasios. No tengo miedo de nadie, le gané a todo el mundo. No recuerdo haber perdido sesiones de sparring: siempre ganaba».
«Borz» también dijo que quiere compartir el octágono con el sudafricano Dricus Du Plessis, que le arrebató el cinturón de campeón a Strickland el pasado fin de semana, el 13 de abril en el UFC 300 de Las Vegas, o salir por una tarifa doble para pelear contra cualquier luchador puntero de la división.
Dadas las circunstancias, un combate entre Khamzat Chimaev y Sean Strickland sería una buena adición al evento de aniversario.