“Estoy con las dos manos por Caín Velásquez”, dijo Emelianko en otro videoblog publicado en su canal de Youtube. “No diré qué haría yo en esta situación, pero me parece que lo habría hecho mucho más difícil que él. Lo alcanzaría y al menos le dispararía a este ciudadano en las rodillas. Y estaría listo para asumir toda la responsabilidad por ello”.
La víspera apareció un video con la liberación de un luchador estadounidense, quien, a la salida de los muros del penal, dijo a los periodistas que estaba deseando reencontrarse con su familia tras una condena de 254 días de prisión.
Además de pagar una fianza de un millón de dólares, las condiciones para la liberación de Caín Velásquez incluyen el uso de un brazalete con GPS, la ausencia de armas, controles regulares y la prohibición de acercarse a las víctimas a menos de trescientos metros.