Según The Irish Sun, el incidente ocurrió el 17 de julio en las Islas Baleares durante una fiesta dedicada al cumpleaños del ex campeón de la UFC, y la víctima es un irlandés de 20 años que recibió contusiones y una herida en la cabeza. Después de curar sus heridas en un hospital español, la niña regresó a Irlanda, donde presentó una declaración oficial ante la policía.
Con la información disponible, Conor McGregor ha sido descartado como sospechoso esta vez, pero el mismo hecho de que un posible delito grave se haya relacionado con su nombre nuevamente sugiere que el irlandés continúa llevando un estilo de vida que no está a la altura de sus promesas de un regreso épico al octágono.
Recordemos que el ex doble campeón de UFC se recupera de una severa fractura en la pierna que recibió el verano pasado en un enfrentamiento con Dustin Poirier, y planea retomar su carrera a principios del próximo año.