Estadio Air Albania, Tirana, Albania. En el evento principal del espectáculo, el escandaloso peso welter local (hasta 66.7 kg) Florian Marco (12-0-1, 7 KOs), conocido con el apodo de «Rey de Albania», venció al portero mexicano con la ayuda del jueces y el árbitro
Miguel Parra Ramírez (21-3-1, 14 KO).
Desde el gong inicial, Marku trató de imponer su juego a su oponente, pero respondió con un sólido ritmo de trabajo. Todo terminó con un mahach de fondo de pozo en el segundo período de tres minutos: los tiros del favorito parecían un poco más poderosos, pero el perdedor golpeó con más frecuencia.
Sin embargo, en el tercer asalto, Marku tomó la iniciativa y comenzó a empujar al oponente, y en los siguientes tres minutos fue recompensado por los esfuerzos del árbitro: registró una caída muy controvertida (Parra Ramírez claramente se resbaló).
El mexicano reaccionó a la decisión del tercero en el ring armando una feroz pelea con un luchador local, que terminó en choques de cabezas – golpeó a Mark. El mexicano terminó más que nunca, pero el favorito aún no podía acostumbrarse a él, incluso intentó cambiar los bastidores.
En el sexto asalto, Parra Ramírez se tomó un respiro y de inmediato cedió la iniciativa. El árbitro intervino nuevamente y privó al invitado de otro puntaje de crédito. Para ser honesto, nadie entendió por qué esta vez el mexicano fue multado.
Parecía que todo en la pelea estaba claro, y luego en el octavo asalto, Parra atrapó a Mark con un gancho de izquierda y lo sentó en el quinto punto.
Abajo va Marku pic.twitter.com/OcVRLLZQT1
— (@hh_boxeo) 25 de agosto de 2022
El mexicano se apresuró a terminar y el árbitro tuvo que actuar: buscó una excusa para intervenir, suspendió la pelea y luego detuvo por completo el asalto 10 segundos antes de lo esperado. La pausa entre las rondas 8 y 9 también se prolongó «por alguna razón».
Las rondas finales Parra Ramírez estaba persiguiendo a Mark, pero pedaleó hacia el gong. Los jueces dieron la victoria por unanimidad al favorito. Resulta que lo que estaba en juego era el cinturón de plata del CMB.
Marca UD 10.